Resultado de imagen de espacio disponible 728 x 90
La imagen puede contener: texto

Los dominicanos se suben a la cresta de la nueva ola jonronera


SANTO DOMINGO. El cuadrangular vuelve a acompañar al gentilicio dominicano en las Grandes Ligas. Seis toleteros ya superaron el respetable umbral de los 30, y dos están a las puertas.
Los-dominicanos-se-suben-a-la-cresta-de-la-nueva-ola-jonroneraEdwin Encarnación (39), Nelson Cruz (35), Manny Machado (34), Robinson Canó (32), David Ortiz (32) y Carlos Santana (31) ya están en el barco. Albert Pujols y Adrian Beltré (29) pueden subirse esta semana. Este grupo, salvo Ortiz, ha expresado su interés en estar con la novena dominicana que jugará el IV Clásico Mundial de Béisbol en marzo. En conjunto totalizan 261 jonrones, mucho más que el líder de Las Mayores, Orioles de Baltimore (226). Entre Encarnación, Cruz y Machado tienen más cuadrangulares que los Bravos de Atlanta (104). Un club que pudo ser más grande si José Bautista (17) no hubiese lidiado con lesiones que lo han sacado de acción por 46 partidos. Sería la primera vez que ocho criollos superaran la treintena desde 2004, cuando se estableció la marca de 11, y apenas la tercera, tras los ocho de 2002. Y primera desde que entró en vigencia el programa de dopaje en la liga (2005), que marcó el fin de la bautizada “era de los esteroides”, que colocan como punto de partida 1992. Hace 12 años, Beltré (48), Pujols (46), Manny Ramírez (43), Ortiz (41), Moisés Alou (39), Vladimir Guerrero (39), Aramis Ramírez (36), Alex Rodríguez (36), Sammy Sosa (35), Miguel Tejada (34) y Tony Batista (32) se combinaron para despachar 429 pelotas fuera del parque. Cuando restan 20 días para concluir la temporada regular, Encarnación disputa cuerpo a cuerpo con Mark Trumbo (41) y Brian Dozier (39) el liderato no solo de la Liga Americana, sino de toda la MLB. El próximo palo de cuatro bases del romanense le dará su segunda campaña con 40, un número que sube su valor de cara a una agencia libre en la que puede conseguir un pacto de US$25 millones por campaña o uno que supere los US$100 millones. Del grupo de 2016, Santana es el único que se estrena en el club de los 30. Lo logra en su sexta campaña en el Big Show, y llega en un curso de apuros para el oriundo de Los Mameyes en Santo Domingo Este. La extensión de cinco años que Santana acordó con la tribu en 2012 por US$21 millones termina en noviembre. El club tiene una opción de US$12 millones para 2017, con un buyout (cláusula de rescisión) de US$1.2 millones). En su candidatura para conseguir más dinero, Santana puede agregar el hecho de ser el pelotero con la mejor disciplina en el plato (apenas hace swing al 19.5% de los lanzamientos fuera de la zona de strike). Con otro jonrón, Pujols llegará a su campaña 14 con 30 o más. Igualará con Barry Bonds en el segundo lugar de todos los tiempos, y se colocará a una de la marca que ostentan Alex Rodríguez y Hank Aaron. Ortiz, en su décimo curso de treintena, tiene la oportunidad de convertirse en el jugador que se retira con la mayor cantidad de bambinazos, una hazaña que está en poder de Dave Kingman (35 en 1986). A los 37, el madero de Beltré ha regresado a 2013 cuando disparó 34 para mejorar más su perfil de inmortal. Esta zafra sus palos los pueden ayudar a lograr la mayor cantidad de producidas desde su histórico 1998 cuando terminó con 121 empujado por el récord de cuadrangulares de un antesalista (48, igualados con Mike Schmidt). Si bien Felipe Alou, Ricardo Cary, Pedro Guerrero y George Bell enseñaron el poder que tenía el país, es a mediados de los 90’s con Sammy Sosa, Manny Ramírez y Alex Rodríguez que el batazo de cuatro bases sustituye al pitceho como referente del pelotero dominicano. con cifras 477 Jonrones lleva David Ortiz como bateador designado, líder de todos los tiempos. Frank Thomas (269) y Edgar Martínez (243) siguen. 247 Cuadrangulares tiene Robinson Canó como intermedista, máximo en la Liga Americana. Jeff Kent es el rey 351. Producción a ritmo alto La producción jonronera esta de vuelta en las Grandes Ligas. En 2016 se batea 1.17 vuelacercas por partido, igualando el pico histórico alcanzado en el 2000, cuando las jeringas llegaban por furgones hasta los dugouts. En 2014 era de 0,86. Hasta ayer se habían conectado 4,990 jonrones en 1,215 juegos, mientras que en 2015 se dispararon 4,909 en 1,348. En el 2000 se estableció el récord con 5,693.

Comparte esta Noticias en tu Facebook

Share on FacebookTweet on TwitterPlus on Google+


EmoticonEmoticon